Con motivo del Día Internacional para la erradicación de la Violencia contra las Mujeres se llevarán a cabo esta semana diversas actividades de sensibilización y denuncia contra este tipo de violencia. El jueves 25 de noviembre en la Plaza del Cardenal Belluga (la Plaza de la Catedral)a las 19 h culminará la semana con una concentración y una cadena humana. Para quien esté interesado dejo el enlace con el programa que se va a desarrollar y animo a todos los que os encontreis por allí a participar que sin duda merece la pena y hace falta.
http://www.murcia.es/ServiciosSociales/pdf/noticias/25%20noviembre.pdf
Amparo Baños
la movilización y rechazo de todo la sociedad ante la violencia desarrollada contra las mujeres y el apoyo a éstas para que sigan adelante, para demostrarles que no están solas y para animarles a decir NUNCA MÁS son de las cuestiones más importantes que hoy día existe en este país. La violencia contra las mujeres es un problema de esta y de otras muchas sociedades que hay que erradicar por eso me parece que todas estas campañas son muy positivas y necesarias. Aún así para erradicar esta violencia hacen falta más medidas a parte de campañas como estas pues solas no pueden hacer nada. Por eso el Estado y toda la sociedad tiene y creo como obligación de ciudadano que poner todo lo que pueda de su parte para conseguirlo.
ResponderEliminarLas campañas contra la violencia de género son un elento fundamental para intentar luchar contra la violencia y combatirla.Se comporta como un amigo y asegurador de la mujer maltrada algo que es muy importante para ellas sentirse respaldados por alguien.Sin embargo las cifras de mujeres que mueren en manos de sus conyuges o compañeros sentimentales son cada vez mayores.Y se necesitan otros apoyos para intentar paliar la violencia.
ResponderEliminarMARI CARMEN RUIZ MÉNDEZ.
La violencia de género aumenta cada vez en mayor medida.
ResponderEliminarExactamente hoy en la tele, ha salido otro caso de violencia doméstica. Un hombre no sólo ha matado a su mujer sino que también ha matado a su hijo con 16 años. Después este se ha suicidado. Es imperdonable lo que hacen estas personas, acabar con la vida de personas inocentes.
Se deberían endurecer las penas contra estas personas, como la condena de muerte, haber si así se disminuyera el número de maltratadores.
También apoyar a las personas que sufren violencia por sus parejas para denunciarlos y acabar antes de que sea demasiado tarde con ese sufrimiento.
MARÍA ISABEL PEÑA PÉREZ
Respecto a lo dicho por María Isabel estoy totalmente deacuerdo, endurecer las penas contra estas personas sería una respuesta adecuada para intentar solventar la situación, pero según la charla sobre violencia de género, de la cual formé parte, he de decir que la chica que nos dió la charla, se mostró retraída hacia la "cura" de esta situación, ella pensaba que seguiría existiendo, y que la mejor forma sería la mejora de condiciones para que la víctima se mostrase respaldada. JOSE CARLOS MARTINEZ CASTILLO
ResponderEliminar"LLEVAR EL TEMA A LA ATENCION PUBLICA"
ResponderEliminarEn su mayor parte, el coste humano de la violencia de género es invisible. El miedo y la vergüenza siguen impidiendo que muchas mujeres denuncien su situación y, por ello, los datos recogidos son a menudo insuficientes e inconsistentes. Sin embargo, en las dos últimas décadas se han alcanzado logros significativos para sacar el tema a la luz pública e incluirlo en las agendas de las políticas internacional y nacional.
Las organizaciones de la mujer se han puesto a la cabeza llevando a cabo una amplia gama de esfuerzos innovadores como la prestación de servicios, el cabildeo y la redacción de proyectos de ley, la concienciación de la abogacía, la educación y formación y la creación de redes regionales, nacionales e internacionales que trabajan por acabar con la violencia.
Más de 45 países tienen ya una legislación específica sobre la violencia doméstica y un creciente número de países ha instituido planes nacionales de acción para acabar con la violencia contra la mujer. Sin embargo, la falta de los recursos adecuados para aplicar estas políticas sigue impidiendo el progreso.
Mª del Mar Gonzalez Valero